 
El pasado sábado 5 de abril, Santiago de Compostela acogió la primera edición del festival Jaleo!, una nueva propuesta que reunió para su primera edición un cartel de lujo. El evento tuvo lugar en el Pabellón Multiusos Fontes do Sar, un espacio amplio y versátil, aunque no precisamente diseñado para la música en directo. Desde los primeros compases, quedó patente una de las grandes asignaturas pendientes de muchos festivales celebrados en este tipo de recintos: la acústica. El sonido resultó plano y conpérdida de matices, dificultando la experiencia sonora. No fue por fallos técnicos o de producción, sino por las limitaciones propias de un pabellón concebido para el deporte y no para la música.
Junto a esta problemática acústica, se repitió una de las quejas más habituales en este tipo de eventos: el colapso en los baños. Durante la segunda parte de la jornada, el acceso a los aseos fue un reto, con largas colas, falta de higiene evidente y espacios completamente inutilizados por momentos. Una situación que, por desgracia, se ha normalizado en demasiados festivales, y teniendo en cuenta el precio de las entradas y el de las bebidas, que te las sirven de botellas de 2 litros de plástico, pues ya podían por lo menos permitirnos hacer nuestras necesidades en unas mínimas condiciones de higiene.
Por el lado positivo, el festival sí supo destacar en otros aspectos logísticos. El sistema de recarga de pulseras fue ágil y accesible, con apenas esperas. Lo mismo sucedió en las barras, donde el ritmo de trabajo del personal permitió que pedir una consumición no se convirtiera en una odisea. Un detalle que se agradece y que demuestra una buena planificación en este apartado.
La jornada arrancó con Dani Dicostas, cuya propuesta quedó por debajo de las expectativas. Aunque ofreció una actuación correcta, no logró destacar ni conectar del todo con el escaso público que se dió cita en su turno, dejando una sensación de que su presencia sobre el escenario podía haber tenido mayor impacto.
Muy diferente fue lo vivido con Carlos Ares, que se consolidó como uno de los nombres fuertes de la noche. Su directo fue contundente, más eléctrico y directo que en anteriores ocasiones. Con una banda ampliada, sus canciones —tanto las nuevas como las reimaginadas de "Peregrino"— resonaron con fuerza y una calidad más propia de un artista que lleva muchos más años sobre los grandes escenarios. Cada vez más gente se sabe sus letras, y su presencia escénica deja claro que pisa fuerte y con paso firme hacia el futuro.
El turno de Zahara sirvió para abrir oficialmente la gira presentación de su nuevo disco "Lento Ternura". Un álbum y un directo muy distintos a lo que ofreció en su anterior etapa, "Puta", y la gira que la acompañó, “Rave”. En esta nueva propuesta, Zahara apuesta por un formato más íntimo, introspectivo y conceptual. Aun así, no faltaron momentos de sorpresa y performance, como la interpretación de uno de sus temas desde dentro de un inodoro portátil, reafirmando su capacidad para romper moldes y sorprender incluso a su público más fiel. Como siempre estuvo acompañada en el escenario por su inseparable Martí Perarnau IV y Manuel Cabezalí y recupera para este tour al batería Xavi Molero que ya estuvo presente en el final de la era "PUTA" y en la gira "Drums & TVs" en 2022.
Viva Suecia llegaron al Festival Jaleo! como el gran cabeza de cartel. En esta ocasión se les notó más frescos que en sus últimas actuaciones del 2024, con una energía renovada que agradeció todo el público. Aun así, su constante presencia en festivales hace que, por momentos, para los amantes más habituales, y para los menos habituales también, de la música en directo, su propuesta empiece a sonar algo repetitiva. Anunciaron que esta sería una de las últimas fechas con el setlist actual, ya que en los próximos meses publicarán un nuevo álbum. Con todo, su actuación dejó claro por qué siguen siendo una de las bandas más demandadas del país.
Una de las grandes actuaciones de la noche fue Sexy Zebras, que demostraron que, si bien en salas pequeñas no acaban de dar su mejor versión, en el contexto de un gran festival brillan como pocas bandas. Su energía sobre el escenario es desbordante y brutal, el sonido directo, y su actitud, absolutamente entregada, hacen que ver a Sexy Zebras en un gran festival sea una de las mejores cosas que vais a poder hacer este verano. Cuando interpretaron su tema “Jaleo”, que comparte nombre con el festival, el público se desató y si alguien quedaba sin estar bailando y saltando, en ese momento se unió al gran pogo y a la gran fiesta final de la primera edición del Festival Jaleo!. Fue, sin duda, uno de los grandes momentos de esta primera edición.
Entre concierto y concierto, el encargado de mantener el ambiente fue David Van Bylen, uno de los DJs más reconocidos y respetados del panorama nacional. Conocido por sus mashups y remezclas, lleva años poniendo la banda sonora a los mejores festivales del país, y Jaleo! no fue la excepción. Su sesión fue vibrante, bien medida y perfectamente adaptada al contexto, demostrando por qué sigue siendo, para muchos, el mejor DJ de este circuito.
Desde NoSoloEsRuido queremos agradecer y reconocer el trabajo de todas las personas que hicieron posible este festival: camareros, personal de limpieza, seguridad, técnicos, etc. También a Art Music Agency, por una organización eficaz y cuidada. Y, por supuesto, gracias por contar con nosotros para contar lo vivido en esta primera edición del festival Jaleo!, que esperamos sea solo el comienzo de una larga historia.