 
Este pasado viernes 8 de noviembre la agenda de conciertos de VIbra Mahou hacía su parada en Vigo, en la sala SUPERSONIC y con Rufus T Firefly como protagonistas.
El formato del concierto era un acústico, pero siendo Rufus T Firefly la banda elegida, sabemos que no será así al 100%. Los madrileños actuaron en Vigo en un formato de cuarteto, con Víctor Cabezuelo con unos teclados y guitarra, una Julia Martin-Maestro con una batería reducida a la mínima expresión, acompañada de otra pequeña batería electrónica. El resto de la banda, Manola con otros teclados y Miguel con el bajo.
El concierto en sí mismo fue realmente sorprendente, puesto que no es habitual escuchar a Rufus T Firefly casi “desnudos” en sus canciones. Todos los temas (a excepción de 1) son algunos de los clásicos de la banda, pero sonando realmente diferentes, casi reducidos a la mínima expresión, y la voz de Víctor Cabezuelo sonaba muy muy diferente a lo habitual, no se si porque no la “acompañó” tanto como en otroas ocasiones, o simplemente porque no estaba tan “tapada” por capas y capas de sonido, pero aún así te envolvia y cautivaba desde la primera estrofa.
En su visita por la ciudad olívica Rufus T Firefly recuperaron para este novedoso formato alguna de las canciones que menos suelen tocar en sus conciertos. Los presentes hemos podido volver a escuchar en directo temas como “Final Fantasy” y “Un breve e insignificante momento en la breve e insignificante historia de la humanidad” de su álbum “Loto” (2018), “Canción Infinita” de su álbum “Nueve” (2014) que como gran sorpresa, la encargada de poner la voz fue Julia, que nos dejó a todos atónitos con la espectacular dulzura de su voz. Sobre la novedad de ver a Julia cantar, Victor Cabezuelo insinuó que en su próximo álbum habría alguna sorpresa, dando a entender que podremos escuchar cantar a Julia en ese nuevo trabajo.
Otra de las grandes sorpresas que nos deparó el concierto fue escuchar por primera vez uno de los temas que formarán parte de su próximo álbum. Sobre este nuevo tema nos contaron a todos los presentes que aún no tiene un título definitivo, pero que para ese momento la llamarían “Canción de paz”, también nos recordó que en el disco sonaría diferente ya que iría mucho más vestida de lo que íbamos a escuchar en esa noche.
“Torre de Marfil”, “Lafayette”, “Me has conocido en un momento extraño de mi vida”, “Polvo de diamantes”, “El largo mañana”, “Sé dónde van los patos cuando se congela el lago” de su último trabajo “El largo mañana” (2021), “Río Wolf” y “Nebulosa Jade” de su álbum “Magnolia” (2017) fueron el resto de temas que formaron parte de un concierto de Rufus T Firefly, que cada día que pasa y cada concierto que pasa, siguen demostrando que son una de las mejores bandas que hay hoy en día en la península y lo más importante, una banda que pasa de etiquetas y formatos mainstream, para apostar en ser ellos mismos y hacer lo que mejor saben, canciones impresionantes que conforman discos únicos.
Como suele ser habitual, Rufus T Firefly llegó, tocó y triunfó. Como también es habitual, el público presente nos quedamos con ganas de más. El que quizás sea el único punto negro de la noche, fue la sala escogida para el evento. El sonido de la sala fue algo decepcionante, teniendo que “sufrir” durante todo el inicio del concierto el continuo chisporroteo de uno de los altavoces, desde la sala se afanaron por solucionar el problema, y lo hicieron en parte, pero sin conseguir evitar que en algún momento que otro, los chisporroteos volviesen a hacer acto de presencia. La sala es de un aforo reducido pero ideal para disfrutar de los conciertos en un formato “familiar,” pero las dos columnas llenas de espejos que se encuentran en mitad de la sala, incomodan mucho el poder ver bien el evento desde la mitad trasera del local.
Como siempre, agradecer a Vibra Mahou la apuesta por la música en directo, una apuesta de directos en pequeño formato y en salas pequeñas que es absolutamente maravillosa. La música también es ésto, poder juntarte en una pequeña sala, con otras personas que lo único que quieren es disfrutar de la música en directo, sin necesidad de más que eso.